El Gobierno argentino anunció la apertura de importaciones para productos de la canasta básica

como medida para combatir la inflación.

Aunque ya había productos importados en las góndolas, ahora se observa un aumento en su cantidad, principalmente de países vecinos como Brasil y Uruguay. Las importaciones tienen precios variados, algunos similares a los locales y otros con diferencias de hasta el 15%. La Secretaría de Comercio busca ampliar la oferta para evitar la cartelización y fortalecer la competencia, aunque las pymes expresan preocupación por el impacto en la industria nacional. Las importaciones afectan a diversos sectores, como el de panadería, donde marcas extranjeras entran en competencia con las locales.