La carne aumentó un 12% este mes y se registró la peor caída de consumo en 60 años

Los cortes de mayor costo sufrieron hasta un 30% de disminución en la compra, mientras que el asado se vende un 10% menos que a principio de año.

La carne vacuna sumó un nuevo aumento. En lo que va de noviembre los precios crecieron hasta un 12% y hay una caída en el consumo de todos los cortes. A nivel nacional se contabiliza una disminución del consumo per cápita, la más severa en 60 años.

La carne es uno de los principales productos de la canasta alimentaria y ya acumula una suba de al menos 30% en lo que va del 2020.

Así lo confirmó a El Litoral Alberto Schiffo, empresario del sector cárnico local.

Schiffo confirmó que los valores de los novillos han ido aumentando en las últimas semanas.

Desde el mes de octubre en el Mercado de Liniers se registró una suba de entre un 6% y 7%, pero Schiffo reconoció que el impacto en la góndola fue de entre un 11% y 12%.

“El más afectado siempre es el consumidor”, reconoció.

El nuevo ajuste se suma al del 6,5% que ya tuvieron los cortes vacunos en octubre.

El empresario precisó que en lo que va del año el aumento de la carne roja puede llegar hasta un 30% acumulado.

Si bien hace meses se registra una caída en el consumo, los empresarios del sector y los comerciantes vienen registrando un índice histórico.

Schiffo precisó que Argentina está atravesando una bajante histórica “que no se veía hace al menos 60 años. El consumo per cápita no supera los 50 o 52 kilos”, precisó.

Los cortes más costosos, como son la nalga, el lomo, el bife ancho o el bife angosto tuvieron una disminución en el consumo de hasta el 30%.

En lo que se refiere a los cortes del cuarto delantero, de precios más bajos, registraron una caída del 12%, y corresponde a aguja, paleta, pecho y falda.

El asado, por su parte, tuvo entre un 7% y un 10% de caída en la demanda.

“Son porcentajes locales que tienen correlación con los índices nacionales”, precisó el empresario.

En las góndolas locales, los cortes de carnes rojas se encuentran entre $300 y $500 por kilo. Sólo la carne picada común se mantiene en un margen de $230.

Respecto de las carnes alternativas, los cortes porcinos aumentaron 4,8% en lo que va de la cuarentena mientras que, en el caso del pollo, el alza alcanzó el 13,4% en ese período.

En diálogo con este medio, comerciantes de carne locales reconocieron que los clientes ya no compran por kilo, sino por el efectivo que dispongan.

“Llevan lo que les alcanza, te piden por dinero y no por kilo como antes. Los precios se remarcan semana a semana”, reconoció el encargado.

El precio de la carne vacuna acumuló una suba del 20,7% desde marzo último, cuando comenzó la pandemia de coronavirus en la Argentina. Así lo indicó un informe de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados de la Argentina.

El incremento obedecería, por un lado, a un aumento acumulado en el valor del ganado que se terminó trasladando a la carne y, en paralelo, al encarecimiento de insumos claves para la producción, como el maíz para engorde, así como demás costos en carnicerías.

Para el mes próximo se espera que vuelva a subir, lo que representa un verdadero golpe a los enflaquecidos bolsillos de los consumidores que vienen perdiendo la batalla contra la inflación.

Si bien se difundió que el Gobierno nacional avanza en el diálogo con los frigoríficos para contar con un esquema que garantice los cortes populares a buenos precios para el mercado interno, Schiffo reconoció que no hay presentaciones oficiales. “Desde el sector aún no hemos recibido una propuesta de precios máximos ni algún programa similar al Carne para Todos, como se hizo en los gobiernos kirckneristas”, informó.